La organización humanitaria internacional World Vision ha acogido con satisfacción la salida del primer cargamento de granos del puerto marítimo ucraniano de Odesa, y espera que sea el primero de muchos para hacer frente urgentemente a la crisis mundial de hambre.
El barco, que partió ayer a las 9.30 hora local de Ucrania, se dirige al Líbano, actualmente sumido en una crisis humanitaria cada vez más grave. Más de dos millones de personas en el Líbano necesitan ayuda de emergencia, además de 1,5 millones de personas refugiadas sirias que no tienen acceso a servicios básicos para subsistir. En junio del año pasado, cerca de un tercio de los niños y niñas del Líbano no tuvieron acceso a una alimentación adecuada. Con el empeoramiento de la crisis de hambre y la escasez de cereales, World Vision teme que se convierta en una situación permanente para la mayoría de los niños y niñas.
«Millones de personas en todo el mundo dependen del grano ucraniano. Sin él, los niños, niñas y sus familias se enfrentan a una mayor escasez de alimentos y a preocupantes subidas de precios», afirma Jennifer Neelsen, Directora de la Respuesta a la Crisis de Ucrania para World Vision. «Durante meses, el conflicto ha impedido cualquier envío marítimo, por lo que las agencias humanitarias, incluida World Vision, tienen la esperanza de que éste sea sólo el primero de un flujo regular de nuevos cargamentos. Ahora mismo, unos 20 millones de toneladas de grano están almacenadas en Ucrania. Esperamos que salgan», agregó.
Casi 50 millones de personas están atrapadas en una crisis mundial de hambre, a un paso de la hambruna que pondría a los niños y niñas vulnerables en riesgo de desnutrición grave o incluso de muerte. Esta crítica situación se ha visto agravada principalmente por el conflicto de Ucrania, los conflictos en todo el mundo, la pandemia por COVID-19 y el cambio climático.
“La exportación de cereales no puede resolver todos los problemas de hambre derivados del cambio climático y los conflictos, pero es de esperar que reduzca la crisis y contribuya a que los precios sean más asequibles. Este envío es una gota en el océano de lo que se necesita, sin embargo, es un comienzo. Esperamos que el acuerdo se mantenga. Los flujos de alimentos deben incrementarse inmediatamente si queremos salvar vidas», afirmó Neelsen.
World Vision está haciendo frente a la mayor respuesta humanitaria en 70 años de existencia y pretende asistir con alimentos y medios de subsistencia a 22 millones de personas en los 25 países más afectados.
Para entrevistas y más información:
Mishelle Mitchell, Directora Regional de External Engagement y Comunicación
Mishelle_Mitchell@wvi.org